

Gran Nayar
Pueblos originarios:
O’dam (tepehuán del sur)
Mexicanero
Náayari (cora)
Wixárika (huichol)
Está situada al sur de la Sierra Madre
Occidental, de clima templado a cálido, con
un paisaje de serranías y barrancas en el
Hauxamanaka o Cerro Gordo. La vegetación
está compuesta por bosques de pino-encino,
pastizales y matorrales, cactáceas, agaves,
guamúchiles y huizaches. Esta zona es
hábitat de venados, jabalíes, urracas, tortugas
de río, pumas y varias especies de serpientes
y lagartos.
Las obras de arte de esta región se originan
en actividades cotidianas y de rituales. Los
pueblos o’dam, náayari y wixárika poseen una
tradición textil en telar de cintura, con estilos
y tecnologías particulares, destacan los
morrales elaborados por tejedoras coras, con
colores brillantes y una estructura de tejido
doble, triple o cuádruple, los textiles
bordados wixárika y o’dam, así como
confecciones con telas satinadas.
Confeccionan objetos ceremoniales como
jícaras y tablas votivas decoradas con
chaquira o estambre; los wixárika han
desarrollado un arte para el consumo externo,
inspirado en su cosmovisión e iconografía, en
ocasiones opuestas a los cánones estéticos
para las piezas de uso interno. Producen
máscaras para la Semana Santa náayari, las
pipas ceremoniales o’dam e instrumentos
musicales.
Purépecha
Pueblos originarios:
P’urhépecha (purépecha)
Región montañosa con valles, cañadas y
ríos, situada en una zona tropical húmeda
con clima templado. Tiene volcanes extintos
o inactivos cubiertos por bosques de pino,
encino y oyamel. Habita fauna silvestre, como
venados, coyotes, coatís, armadillos, cuervos,
tuzas, colibríes, peces blancos, achoques
(especie endémica de ajolote) y varias
especies de serpientes, lagartos y ranas.
El arte purépecha emplea plantas lacustres
como p’atsimu (tule) y chuspata que, junto
con el popote de trigo, aportan fibras para
el tejido de cestería, petates, sombreros,
muebles y figuras religiosas u ornamentales.
La alfarería se practica en modelado, con
pastillaje, engobado, escultura policromada,
bruñido o vidriado en verde, azul, negro o
blanco. Entre los textiles hay rebozos listados
de Ahuirán, gasas de Aranza, deshilados de
San Felipe de los Herreros y brocados de
Angahuan y Cuanajo, este último también
destacado por sus tallas en madera. En
Uruapan y Pátzcuaro se trabaja el arte
del maque y la laca perfilada en oro, con
técnicas y materiales de origen prehispánico.
Instrumentos de cuerda, música y canciones
en lengua purépecha también forman
parte del repertorio de este pueblo, cuya
apreciación estética está vinculada a los
deberes comunitarios, los valores morales y la
religiosidad.
