

Sierra Tarahumara
O’ob (pima)
Rarámuri (tarahumara)
Makurawe / warihó (guarijío)
O’damí (tepehuán del norte)
La Sierra Tarahumara se extiende por
el suroeste de Chihuahua y los estados
colindantes. Las Barrancas del Cobre poseen
una vegetación de matorrales y selva baja
en las zonas cálidas hasta bosques de pino,
encino y oyamel en las áreas altas y frías.
Maderas y cortezas, así como diferentes
fibras vegetales, son utilizados en las artes de
la región. Los colores, formas e iconografía
remiten al territorio y a simbolismos rituales.
Sotol, palma y agujas de pino dan cuerpo a
piezas de cestería, sombreros y petates en los
pueblos pima, rarámuri y guarijío. Emplean
maderas de táscate, encino, pino y madroño
para utensilios domésticos, violines, arpas,
tambores, máscaras y juguetes, además de
figuras de corteza hechas por escultores
rarámuri. Los pimas bordan textiles inspirados
en pinturas rupestres locales, mientras que
los rarámuris conservan técnicas de tejido
como el labrado de urdimbre, realizadas con
lana o fibras industriales de brillantes colores.
Este pueblo practica la alfarería para elaborar
piezas domésticas y ornamentales, así como
ollas para la bebida fermentada tesgüino.
Kikapú
Kikaapoa (kikapú)
El pueblo kikapú es un pueblo binacional que
habita en Texas, Kansas y en la localidad de
El Nacimiento, Coahuila. Se encuentra en la
región de la Sierra de Santa Rosa, cerca de
las fuentes del río Sabinas, zona de bosques,
cascadas y manantiales rodeada por llanuras
y desiertos. La vegetación incluye huizaches,
cactáceas, ahuehuetes, álamos, gobernadoras,
pinos, encinos y cedros; hábitat de venados,
conejos, liebres, serpientes de cascabel,
coyotes, tigrillos, osos negros y manadas de
bisontes. Tienen presencia en Tamichopa,
Sonora, al norte de la Sierra Madre Occidental
Su arte está relacionado con su historia
como pueblo seminómada, la cacería y las
celebraciones llamadas pow-wow. Destacan
las prendas de gamuza de venado bordadas
con chaquira, como tehuas (mocasines) y
mitazas; los penachos y atuendos para danza,
así como diferentes accesorios y joyería de
chaquira, hueso y semillas. Con el tule se
tejen tanto las esteras ceremoniales como los
paneles que constituyen las paredes de las
apakuenikane (casa de invierno, en forma de
domo elíptico).
